"El gobierno ha justificado el aislamiento, la pobreza de Cuba y la falta de democracia, como consecuencia de la hostilidad de Estados Unidos" dijo el secretario de Estado adjunto para la Democracia, los Derechos Humanos y el Trabajo, Tom Malinowski.
febrero 03, 2015
El restablecimiento de relaciones diplomáticas de Estados Unidos y Cuba y el levantamiento del embargo dejarían a la isla sin un enemigo a quien culpar por sus decisiones fallidas y su aislamiento durante casi 60 años, dijo el secretario de Estado adjunto para la Democracia, Derechos Humanos y el Trabajo, Tom Malinowski.
"Ante su propio pueblo, el Gobierno ha justificado el aislamiento, la pobreza de Cuba y la falta de democracia, como consecuencia de la hostilidad de Estados Unidos. Estas son malas excusas", explicó el Secretario.
Malinowski intervino en una audiencia en el nuevo Congreso del Subcomité de Relaciones Exteriores del Senado para Asuntos del Hemisferio Occidental sobre Derechos Humanos y libertades fundamentales en Cuba bajo la luz del inicio de las conversaciones entre ambos países.
El Secretario confía en que el cambio de política echará por tierra la imagen de víctima que el Gobierno cubano ha utilizado también ante la comunidad internacional para desacreditar las sanciones económicas de Estados Unidos y desviar la atención de sus maltratos a la disidencia.
"Tenemos que enfrentar la dura verdad de que no ha debilitado el aparato represivo del Gobierno de Castro. No se ha fortalecido la sociedad civil de Cuba", dijo Malinowski. "No nos ha dado el poder que necesitamos para presionar por un cambio, o al pueblo de Cuba la esperanza que anhelan. El Gobierno de Castro ha sido feliz en su aislamiento. El pueblo cubano, no".
El Secretario ve dos caminos para el Gobierno de Castro: Comenzar reformas para beneficiarse de las medidas estadounidenses en áreas como telecomunicaciones, empresa privada, viajes y sociedad civil, lo que traería mayor independencia al pueblo cubano; o restringir las reformas, lo que afectaría su legitimidad tanto dentro como fuera de Cuba y mostraría el verdadero culpable.
"Ahora, todos los países de América Latina y el Caribe, y de hecho todo el mundo sabe que Estados Unidos no es el obstáculo para la integración de Cuba con el hemisferio y sus perspectivas de desarrollo económico. Las políticas cubanas son el obstáculo. Ahora todos los ciudadanos de Cuba saben que Estados Unidos está dispuesto a tener mejores relaciones con su país", dijo Malinowski.
El Secretario advirtió que tanto él como la Administración están conscientes de que a pesar del inicio de los diálogos entre ambos países y la liberación de 53 prisioneros políticos, el Gobierno continúa su actitud y acciones represivas contra la oposición.
Luego, aludió al performance fallido de la artista Tania Bruguera, el encarcelamiento del rapero El Crítico, del activista Iván Fernández Depestre, y de la Dama de Blanco Sonia Garro.
Malinowski aseguró que el Gobierno estadounidense tomará en cuenta los puntos de vista de la sociedad civil cubana en la promoción de una Cuba renovada, uno de cuyos primeros pasos sería reunir a voces independientes cubanas con Gobiernos de la región en la Cumbre de las Américas.
"Ante su propio pueblo, el Gobierno ha justificado el aislamiento, la pobreza de Cuba y la falta de democracia, como consecuencia de la hostilidad de Estados Unidos. Estas son malas excusas", explicó el Secretario.
Malinowski intervino en una audiencia en el nuevo Congreso del Subcomité de Relaciones Exteriores del Senado para Asuntos del Hemisferio Occidental sobre Derechos Humanos y libertades fundamentales en Cuba bajo la luz del inicio de las conversaciones entre ambos países.
El Secretario confía en que el cambio de política echará por tierra la imagen de víctima que el Gobierno cubano ha utilizado también ante la comunidad internacional para desacreditar las sanciones económicas de Estados Unidos y desviar la atención de sus maltratos a la disidencia.
"Tenemos que enfrentar la dura verdad de que no ha debilitado el aparato represivo del Gobierno de Castro. No se ha fortalecido la sociedad civil de Cuba", dijo Malinowski. "No nos ha dado el poder que necesitamos para presionar por un cambio, o al pueblo de Cuba la esperanza que anhelan. El Gobierno de Castro ha sido feliz en su aislamiento. El pueblo cubano, no".
El Secretario ve dos caminos para el Gobierno de Castro: Comenzar reformas para beneficiarse de las medidas estadounidenses en áreas como telecomunicaciones, empresa privada, viajes y sociedad civil, lo que traería mayor independencia al pueblo cubano; o restringir las reformas, lo que afectaría su legitimidad tanto dentro como fuera de Cuba y mostraría el verdadero culpable.
"Ahora, todos los países de América Latina y el Caribe, y de hecho todo el mundo sabe que Estados Unidos no es el obstáculo para la integración de Cuba con el hemisferio y sus perspectivas de desarrollo económico. Las políticas cubanas son el obstáculo. Ahora todos los ciudadanos de Cuba saben que Estados Unidos está dispuesto a tener mejores relaciones con su país", dijo Malinowski.
El Secretario advirtió que tanto él como la Administración están conscientes de que a pesar del inicio de los diálogos entre ambos países y la liberación de 53 prisioneros políticos, el Gobierno continúa su actitud y acciones represivas contra la oposición.
Luego, aludió al performance fallido de la artista Tania Bruguera, el encarcelamiento del rapero El Crítico, del activista Iván Fernández Depestre, y de la Dama de Blanco Sonia Garro.
Malinowski aseguró que el Gobierno estadounidense tomará en cuenta los puntos de vista de la sociedad civil cubana en la promoción de una Cuba renovada, uno de cuyos primeros pasos sería reunir a voces independientes cubanas con Gobiernos de la región en la Cumbre de las Américas.
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