"Las iniciativas del Presidente esperan y están diseñadas para promover cambios que apoyen los Derechos Humanos universales y las libertades fundamentales de todos los cubanos, así como cambios que promuevan nuestros intereses nacionales".
Roberta Jacobson, secretaria de Estado adjunta para Latinoamérica.
febrero 04, 2015
El cambio de política de Estados Unidos hacia Cuba busca satisfacer los intereses de los pueblos cubano y estadounidense por igual, dijo la secretaria de Estado adjunta para Asuntos del Hemisferio Occidental, Roberta Jacobson en su testimonio frente a la Comisión de Asuntos Exteriores.
"Las iniciativas del Presidente esperan y están diseñadas para promover cambios que apoyen los Derechos Humanos universales y las libertades fundamentales de todos los cubanos, así como cambios que promuevan nuestros intereses nacionales", dijo Jacobson.
Con este propósito, Jacobson dijo que la Administración actual eligió como vía los contactos pueblo a pueblo y la gestión de modos específicos de aumentar el comercio.
A pesar del poco tiempo de implementación de las medidas, la secretaria de Estado adjunta asegura que ya pueden verse los frutos.
"Ya estamos viendo indicios de que nuestro enfoque actualizado nos da una mayor capacidad para involucrar a otras naciones en el hemisferio y en todo el mundo en la promoción del respeto de las libertades fundamentales en Cuba", dijo Jacobson. "También ha llamado considerablemente mayor atención a las acciones y políticas del Gobierno cubano".
No obstante, a pesar de las acciones de Estados Unidos, Jacobson insistió en que "en última instancia, será el propio pueblo cubano el que impulse reformas políticas y económicas".
Como otros que comparten esta visión, reiteró la inefectividad de los métodos anteriores para lidiar con la falta de democracia y libertades impuestas por el Gobierno cubano, y los efectos negativos que tuvo en la imagen de Estados Unidos frente a la comunidad internacional.
"Nuestro enfoque anterior a las relaciones con Cuba por más de medio siglo, a pesar de basarse en la mejor de las intenciones, no logró empoderar al pueblo cubano y nos aisló de nuestros socios democráticos en este hemisferio y en todo el mundo", dijo.
Jacobson agregó que el Gobierno cubano ha utilizado esta política como una justificación para limitar a su pueblo, una que queda sin efecto con este cambio de política.
Prometió continuar su esfuerzo por promover las libertades políticas y civiles en Cuba, facilitar el libre flujo de información y proveer asistencia humanitaria, con el apoyo de los fondos del Congreso; e incitó a los miembros del este a acercarse a las voces independientes de la sociedad civil cubana.
"También esperamos con interés a un mayor compromiso para empoderar al pueblo cubano a través del contacto autorizado con miembros del Congreso, funcionarios del Gobierno de Estados Unidos y viajeros estadounidenses", dijo Jacobson.
"Las iniciativas del Presidente esperan y están diseñadas para promover cambios que apoyen los Derechos Humanos universales y las libertades fundamentales de todos los cubanos, así como cambios que promuevan nuestros intereses nacionales", dijo Jacobson.
Con este propósito, Jacobson dijo que la Administración actual eligió como vía los contactos pueblo a pueblo y la gestión de modos específicos de aumentar el comercio.
A pesar del poco tiempo de implementación de las medidas, la secretaria de Estado adjunta asegura que ya pueden verse los frutos.
"Ya estamos viendo indicios de que nuestro enfoque actualizado nos da una mayor capacidad para involucrar a otras naciones en el hemisferio y en todo el mundo en la promoción del respeto de las libertades fundamentales en Cuba", dijo Jacobson. "También ha llamado considerablemente mayor atención a las acciones y políticas del Gobierno cubano".
No obstante, a pesar de las acciones de Estados Unidos, Jacobson insistió en que "en última instancia, será el propio pueblo cubano el que impulse reformas políticas y económicas".
Como otros que comparten esta visión, reiteró la inefectividad de los métodos anteriores para lidiar con la falta de democracia y libertades impuestas por el Gobierno cubano, y los efectos negativos que tuvo en la imagen de Estados Unidos frente a la comunidad internacional.
"Nuestro enfoque anterior a las relaciones con Cuba por más de medio siglo, a pesar de basarse en la mejor de las intenciones, no logró empoderar al pueblo cubano y nos aisló de nuestros socios democráticos en este hemisferio y en todo el mundo", dijo.
Jacobson agregó que el Gobierno cubano ha utilizado esta política como una justificación para limitar a su pueblo, una que queda sin efecto con este cambio de política.
Prometió continuar su esfuerzo por promover las libertades políticas y civiles en Cuba, facilitar el libre flujo de información y proveer asistencia humanitaria, con el apoyo de los fondos del Congreso; e incitó a los miembros del este a acercarse a las voces independientes de la sociedad civil cubana.
"También esperamos con interés a un mayor compromiso para empoderar al pueblo cubano a través del contacto autorizado con miembros del Congreso, funcionarios del Gobierno de Estados Unidos y viajeros estadounidenses", dijo Jacobson.
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