Xi Jinping y la invasion capital en la ideologia latinoamericana

Xi Jinping y la inversión capital en la ideología latinoamericana

Enviado por ei en julio 27, 2014 – 9:58 am

Emilio Ichikawa

En su gira por América Latina el Presidente de China Xi Jinping prometió (y firmó) trabajar sobre todo en finanzas e infraestructura. Pero se preocupó además por poner un poco de capital en la tradición ideológica de la región.

Esto puede ser simple protocolo. Pero podría tomarse también como un intento de enraizar profundamente en una zona de gravitación norteamericana. Será un trabajo paciente, porque si algún país ha invertido capital en la rectoría de la cultura y el pensamiento latinoamericano es precisamente EEUU.  

El Presidente de Rusia Vladimir Putin fue menos parsimonioso, y después de “alquilar” una referencia al arte latinoamericano soltó en su divulgada entrevista del 10 de julio (2014): “Los legendarios Bolívar y Martí, ‘Che’ Guevara y Salvador Allende son muy bien conocidos en nuestro país.” ¿Más que Washington y Superman?

Xi Jinping, sin embargo, aspiró a los próceres latinoamericanos canuto por canuto. Jicarita a jicarita.

En su visita a Argentina Xi Jinping, además de firmar una inversión de US$ 2099 millones para renovar el Ferrocarril Belgrano Cargas (entre otros proyectos), dijo en el  discurso de la cena(Julio 18, 2014) en el Museo del Bicentenario: “En esta tierra vasta, hace 200 años el pueblo argentino con el General San Martín al mando, luchó por la independencia y la emancipación, forjando un espíritu nacional…”. Durante la chantada oficial, Xi no olvidó apelar a Perón: “Es pertinente recordar aquí lo que dijo el Presidente Juan Perón: ‘la única verdad es la realidad’…”.

En su discurso de contestación la Presidenta Fernández agradeció la mención a San Martín, correspondiendo: “Desde mi juventud nosotros vimos también con gran admiración el proceso chino, proceso histórico iniciado por el Presidente Mao Tse-Tung, y que culminara en 1949 con la creación de la República Popular China. Recordaba usted otro líder argentino de mi partido: el General Perón. Y la unión que teníamos cuando éramos muy jóvenes y militantes universitarios, data con China desde aquella época. ¿Por qué? Porque frente a un mundo bipolar el Presidente Perón, desde aquí… y el Presidente Mao planteaban una tercera posición…”.

Durante la visita los intercambios entre la Presidenta de Argentina y el Presidente de China se dieron unas escapaditas un poco más informales por las tradiciones culturales. Xi elogió el tango, la carne y el fútbol sudamericano; mientras Cristina, a propósito del Año Nuevo y el horóscopo, comentó que su hija Florencia es de signo Caballlo, su hijo Máximo es Dragón, ella es Serpiente y Néstor Kirchner fue un Tigre. Concluyendo, según el diario La Nación, con una riesgosa frase:“Mire Usted la pléyade de animales que tiene la familia…”.

En Venezuela, Xi Jinping ofreció unas palabras al recibir la Orden Libertador en el Palacio de Miraflores; lo que le clava en la tradición. Pero fue un discurso un tanto vacuo, informal y con interferencias en la traducción. No obstante, hubo otros actos de protocolo tendiendo a la historia, como la entrega Presidencial de una réplica de la Espada de Bolívar y la honra al prócer en su mausoleo. Xi también honró a Chávez en el Cuartel de la Montaña.

En su visita a Cuba Xi Jinping recibió la Orden José Martí. En agradecimiento pronunció un discurso en el que, dentro de su brevedad, dedicó un notable espacio a José Martí. Con imprecisión pero con hábil tendenciosidad política, apeló a un texto martiano de familiar sonoridad. Dijo Xi: “Muchas frases célebres de José Martí también son conocidas en nuestro país, como de altar se ha de tomar a Cuba, para ofrendarle nuestra vida, y no de pedestal,  para levantarnos sobre ella.”

Xin Jinping remitía a la “Carta Abierta de José Martí a Ricardo Rodríguez Otero” (New York, 16 de Mayo de 1886), donde después de dar tumbos entre la revolución y la reforma, concluye El Apóstol de Cuba: “La patria necesita sacrificios. Es ara y no pedestal. Se la sirve, pero no se la toma para servirse de ella.”