Gobierno de Maduro genera nuevo mercado ilegal con tarjetas de crédito
Los controles en Venezuela son generadores de corrupción, escasez de alimentos, medicinas y otros bienes, lo que ha provocado que muchos bienes tengan que ser conseguidos a precios excesivamente elevados. Ese mismo caso se está repitiendo con el monopolio que ha provocado el Gobierno de Maduro con el control de la banca pública y los cupos de dólares para el uso en los viajes y la internet por parte de la población venezolana.
VENEZUELA
CARACAS.- CLARA FRANCO
Especial
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Los controles en Venezuela son generadores de corrupción, escasez de alimentos, medicinas y otros bienes, lo que ha provocado que muchos bienes tengan que ser conseguidos a precios excesivamente elevados.
Ese mismo caso se está repitiendo con el monopolio que ha provocado el Gobierno de Maduro con el control de la banca pública y los cupos de dólares para el uso en los viajes y la internet por parte de la población venezolana.
En la edición de la Gaceta Oficial venezolana del 10 de abril de 2015, el Centro Nacional de Comercio Exterior (CENCOEX), anunció que la banca privada ya no será un operador cambiario, sino que este procedimiento se realizará en la banca del Gobierno.
A partir de ahora, las instituciones autorizadas a otorgar los cupos en dólares son el Banco Bicentenario, del Tesoro, Venezuela e Industrial de Venezuela.
Aproximadamente son cinco millones de venezolanos los que estarían en la necesidad de pasar a la banca pública, comentó a varios medios locales José Grasso Vecchio, director SOFTline Consultores.
Mientras este huracán financiero envolvió a la población y angustió a las personas que tenían un boleto en mano para salir de viaje con todos los requerimientos aprobados por la banca privada, pero con el alto riesgo de que en el destino escogido no iban a
poner obtener los dólares para pagar por sus gastos, en redes sociales como Instagram y Twitter se dispararon las operaciones de un nuevo mercado negro con tarjetas de créditos.
Según medios locales venezolanos, los montos para agilizar estos trámites pueden superar el equivalente de cinco sueldos mínimos.
La lentitud
Para el economista Luis Oliveros, la decisión del Gobierno fue inesperada, sin tomar en cuenta la preparación de la organización ni las previsiones necesarias para esta nueva actividad financiera.
“La banca pública no es dinámica, es lenta y no se encuentra preparada para recibir la gran cantidad de demanda de tarjetas de créditos por parte de las personas que no poseen una expedida por estos bancos”, comentó.
Oliveros consideró que la única noticia “buena” es que el Banco de Venezuela sí cuenta con una optima infraestructura. “La razón de ello es que perteneció a la banca privada y el Banco Santander lo modernizó en el momento en que lo adquirió. Por esa razón, esta entidad financiera si se encuentra preparada para obtener una gran cantidad de personas”.
Sin embargo, añadió que “a pesar de esto, por tener ya varios años funcionando como banca pública, pudiera esperarse que no funcione de una manera tan óptima”.
Otro problema que percibe Oliveros, y que sí detendrá el proceso de elaboración de las tarjetas de créditos, es que “no hay material para imprimirlas”. Ello definitivamente provocará muchas reacciones en el sistema financiero de la banca pública y recomendó
“que aquellos que quieran tarjetas estén pendientes de no caer en estafas o engaños de personas inescrupulosas que pidan dinero para poder obtenerlas”.
Más obstáculos
Por su parte, el economista Francisco Faraco, consideró que la decisión gubernamental de trasladar el acceso del cupo electrónico en dólares preferenciales para viajes al extranjero tiene como objetivo “incrementar las dificultades a las personas para que no tengan dólares preferenciales”.
En su opinión, la banca pública, “a excepción del Banco de Venezuela, no puede administrar ese tipo de producto”.
“Para manejar dólares es necesario tener una línea de crédito en el exterior que administre esa moneda y los banco públicos no lo tienen. A ello se le une la escasez del material plástico que existe en el país y eso no es un secreto para nadie”, aseveró.
“Ya he sabido de avisos ofreciendo conseguirles a las personas este producto, de la banca pública, a precios exorbitantes”, finalizó.
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