Timochenko espera que el 99% de los efectivos de las FARC se desmovilice
El jefe máximo de las FARC, Rodrigo Londoño, alias Timoléon Jiménez (Timochenko). La Habana, 23 de septiembre de 2015. (AFP)
El jefe máximo de las FARC, Rodrigo Londoño, alias Timoléon Jiménez (Timochenko), espera que tras la firma de un acuerdo de paz con el Gobierno colombiano un 99% de los insurgentes se desmovilice, según afirmó en una entrevista con la revista Semana.
Preguntado por el porcentaje de efectivos que se van a desmovilizar, Timochenko
respondió: "De los frentes, el 100 por ciento. Si me pregunta de los guerrilleros, le puedo dejar un margencito, dígale un 99 por ciento", reportó la AFP.
"Yo no descarto que por ahí uno que otro muchacho se descarrille. Eso es normal", agregó.
Según el jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), el principal miedo entre los insurgentes es la repetición de matanzas como las ocurridas en la década de los 80 y 90, cuando unos 3.000 insurgentes desmovilizados, adscritos al partido de la Unión Patriótica, fueron asesinados por elementos paramilitares.
Por otro lado, Timochenko aseguró que, si bien al principio era reacio a ponerle límites de tiempo a las negociaciones con el Gobierno, ahora está "cambiando de opinión".
"Como que me están gustando las fechas. Le toca a uno ponerse metas. Nosotros no estamos trabajando en función de fechas. Estamos en función de acelerar y alcanzar el acuerdo final lo más pronto posible", dijo.
El Gobierno colombiano y el grupo ilegal armado se comprometieron a sellar el próximo 23 de marzo, a más tardar, un acuerdo definitivo para poner fin a una conflagración interna en la que también han participado paramilitares y fuerzas del Estado, y que ha estado muy permeada por el narcotráfico.
Timochenko admitió también que el uso del secuestro como método de financiamiento en las FARC fue un error. Si "tocara volver a reiniciar, no lo volveríamos a hacer", dijo.
En cuanto al futuro de la organización, Timochenko dijo que las FARC no descartan hacer alianzas con otras fuerzas de izquierda para implementar los acuerdos de paz que firmen con el Gobierno.
"Vamos a hacer política sin armas (...) vamos a entrar a un escenario político donde lo fundamental es lograr hacer confluir el mayor número de fuerzas posibles para garantizar el cumplimiento de los acuerdos", afirmó, según Reuters.
"Nosotros no nos vamos a desmovilizar, nos vamos a movilizar políticamente. Vamos a dejar las armas a un lado y vamos a meternos en la lucha política, en las reglas del juego que tiene el régimen", añadió.
En la negociación, las partes ya lograron consensos en temas como dar acceso a la tierra a los campesinos pobres, la lucha contra el narcotráfico, la transformación del grupo ilegal armado en un movimiento político, justicia y víctimas, desminado y desaparecidos.
Actualmente discuten el cese bilateral y definitivo del fuego —que incluye zonas de concentración para los insurgentes con la supervisión de Naciones Unidas— y los mecanismos de refrendación de los acuerdos.
Londoño admitió la posibilidad de que el movimiento político que surja de las FARC participe en las elecciones legislativas y presidenciales de 2018.
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