La hermana de Leopoldo López, aún con esperanza
Diana ha participado en la concentración de la oposición venezolana en Madrid
Más de 25 ciudades se han organizado para ofrecer su ayuda desde la distancia
Manifestantes en la marcha de la oposición venezolana en Madrid.
"Esperamos que en pocas horas el Gobierno se pronuncie y que liberen a los presos políticos", ha declarado Diana López, la hermana del líder opositor detenido Leopoldo López, en la concentración, en Puerta de Sol, Madrid, en apoyo a la gran marcha que celebra la oposición venezolana en Caracas este sábado.
Más de 25 ciudades (Miami, Nueva York, Santiago de Chile, Panamá, entre otras) en todo el mundo se han organizado para "ofrecer ayuda desde la distancia" a lo que ellos llaman su "amada Venezuela". Madrid ha reunido cerca de 150 venezolanos que piden la liberación de los presos políticos, cese de la represión y que se fije la fecha de las elecciones parlamentarias.
Según Diana López, "son más de 80 personas que están injustamente presas y que han sido maltratos y torturados". Ella participa de la concentración en Madrid en representación de "los familiares, padres, hermanos, esposas e hijos de todos los presos políticos" y pide la libertad y la democracia.
López ha contado que su hermano "está totalmente aislado en un edificio aparte en la prisión Ramo Verde" y que los únicos que lo han podido ver habían sido sus abogados, que dijeron que Leopoldo sigue de huelga de hambre y "está convencido de su lucha por la democracia en Venezuela".
Finalmente, Diana ha agradecido el apoyo internacional y ha hecho un llamamiento a los distintos Gobiernos y Congresos extranjeros para que continúen con la ayuda hacia la población venezolana.
El clamor de los venezolanos en Madrid ha sido la libertad de su país. "Venezuela nunca fue una tierra de la que uno quisiera huir", ha exclamado Alberto Pérez, representante del movimiento Voluntad Popular en Europa, quien se dirigió a la concentración para reiterar el apoyo a la delicada situación que atraviesa el país caribeño.
"En Venezuela se ha vuelto costumbre la tortura, la persecución, el asesinato, la asfixia económica, la inseguridad, el desempleo, la corrupción y la escasez", ha dicho Pérez.
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