"Obama continúa apaciguando a dictadores brutales"
Es una vergüenza absoluta que la política exterior del Presidente ignore la defensa de los derechos humanos y la seguridad de EEUU
CONGRESISTA DÍAZ-BALART | 01 de Julio de 2015
WASHINGTON.- MARIO DÍAZ-BALART*
Al seguir adelante con sus planes de abrir una embajada de Estados Unidos en La Habana y una embajada de Cuba en Washington, el presidente Barack Obama continúa con su política fallida de apaciguar a dictadores brutales que amenazan a intereses estadounidenses.
Es una vergüenza absoluta que la política exterior del Presidente ignore la defensa de los derechos humanos y la seguridad de EEUU. El régimen de Castro ha respondido a las incontables concesiones del Presidente aumentado la represión de los activistas pro-democracia.
Desde el anuncio del Presidente el 17 de diciembre 2014, se han producido más de 2.000 arrestos políticos en Cuba. Durante los últimos doce domingos, más de setenta activistas han sido detenidos, incluyendo a las valientes Damas de Blanco que protestan en su camino a misa. En febrero de este año, la dictadura cubana fue sorprendida traficando con armas a través de territorio colombiano, hecho ocurrido después de que un panel de expertos de la ONU emitiera una condena severa a Cuba en marzo 2014 por su tráfico ilegal de armas a Corea del Norte. Por si fuera poco, varios diplomáticos-espías cubanos han sido expulsados de EEUU por sus actividades de espionaje.
Si una embajada de Cuba abre en Washington, no va a representar al pueblo cubano. Sí representará a los servicios de inteligencia cubanos que perpetúan los abusos de derechos humanos contra el pueblo cubano. Sí servirá a los intereses de los militares que trafican armas ilegalmente a nuestros adversarios. Y, muy directamente, sí servirá a los dictadores que continúan empobreciendo y oprimiendo al pueblo cubano.
El pueblo cubano no ha elegido a los Castro como sus líderes. Al contrario, los líderes verdaderos de Cuba son los que están en la cárcel, o que han perdido sus medios de vida, tarjetas de racionamiento, vivienda y salud, simplemente por exigir los derechos humanos. El régimen cubano no los representa. Es su enemigo. Por estas razones, el Subcomité de la Cámara encargada de Asignaciones de Estado, Operaciones Extranjeras y Programas Relacionados negó fondos para una embajada de Estados Unidos en La Habana y para una embajada y consulados de Cuba en los EEUU en su proyecto de ley para el año fiscal 2016.
Para supuestamente ayudar al pueblo cubano a alcanzar la ‘independencia de las autoridades cubanas’, el presidente Obama sigue apaciguando a sus opresores. El pueblo cubano está pidiendo a gritos solidaridad con su lucha por la libertad, no colaboración con los que lo encarcelan. Ojalá tuviéramos un Presidente que entendiera la diferencia.
*Congresista republicano por la Florida
0 comentarios:
Publicar un comentario
Enviar comentarios: