Santos ha recibido 445 propuestas para hacer ajustes al acuerdo con las FARC
"Hasta el momento son 445 propuestas que han sido catalogadas, organizadas y sistematizadas en función de los capítulos del acuerdo. Todas ellas están siendo estudiadas y analizadas con detenimiento y respeto y serán discutidas con las FARC para lograr un nuevo acuerdo lo más pronto posible", dijo el mandatario en una alocución al país.
Santos aseguró que, después de haber reconocido públicamente el resultado del plebiscito, su Gobierno ha sostenido "un diálogo abierto y franco con el país".
Ese diálogo "nos ha permitido escuchar las inquietudes ciudadanas y en muchos casos hemos podido aclararlas y responder las preguntas y dudas que nos presentaron", señaló.
El pasado viernes el equipo negociador del Gobierno, encabezado por su jefe, Humberto de la Calle, regresó a Cuba, sede de los diálogos de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), para buscar un "nuevo acuerdo" con esa guerrilla.
"Justo antes de que el primer grupo de negociadores del Gobierno viajaran a La Habana, les di instrucciones para que trabajen sin pausa y con eficacia para alcanzar ese objetivo que todos los colombianos tenemos: un nuevo acuerdo que nos permita alcanzar una paz estable y duradera, más amplia y más profunda", dijo.
El mandatario expresó su confianza en que "esa misma disposición y apertura anima a las FARC".
"Hoy mismo envié a tres negociadores más a que se concentren en algunos temas específicos que requieren de su concurso para avanzar más rápido", señaló el presidente en referencia al ministro del Interior, Juan Fernando Cristo; el Alto Consejero para el Posconflicto, Rafael Pardo, y el senador Roy Barreras.
"El objetivo es alcanzar un nuevo acuerdo que tenga toda la legitimidad jurídica y política para comenzar a implementarlo lo más pronto posible porque, como lo hemos dicho, el tiempo apremia", puntualizó.
Impulsores del 'No' piden tener un testigo en las negociaciones
Representantes de la campaña del "no" que se impuso en el plebiscito enviaron una carta a Santos en la que piden un testigo sin voz ni voto en la renegociación del nuevo acuerdo en Cuba.
El expresidente Andrés Pastrana, la excandidata presidencial Marta Lucía Ramírez y el exprocurador Alejandro Ordóñez manifestaron al presidente la importancia de que los colombianos vean transparencia en la mesa de negociación "para superar la desconfianza" con la nueva fase del diálogo.
"Cientos de versiones sobre supuestas formas de desconocer la voluntad popular expresada en las urnas están minando el camino hacia la paz que merece Colombia y generado un mar de desconfianzas", dicen los firmantes.
Para mantener la confianza, "respetuosamente le sugerimos crear un mecanismo que sin interferir en las negociaciones pueda servir de acompañamiento y consulta a los negociadores del Gobierno y garantía a la sociedad", añaden.
"Adicionalmente podría existir también un testigo en la mesa de negociación" con las FARC, señalan, pues consideran que "la transparencia es fundamental para superar la desconfianza".
Uribe: Venezuela no debería ser garante
El principal defensor del "No", el expresidente Álvaro Uribe (2002-2010), afirmó en Miami que Venezuela, gobernada por "una dictadura incorregible", no debería seguir siendo garante del proceso de paz en Colombia y además debería ser suspendida de todos los organismos internacionales y regionales.
"Han acabado con uno de los pocos remanentes de democracia que quedaban", señaló Uribe en referencia a la decisión de las autoridades venezolanas de suspender la recogida de firmas para un referendo revocatorio del mandato de Nicolás Maduro.
El expresidente participó en Miami en un foro de exmandatarios precisamente sobre el estado de la democracia en Venezuela.
Después de la victoria del "No", "Colombia está en un momento que requiere de delicadeza", pero, a juicio de Uribe, esa coyuntura es "mejor" que la que habría hoy si el pueblo hubiera dicho "Sí", reportó EFE.
"Si hubiera ganado el 'Sí', hoy las 297 páginas del acuerdo de paz con la FARC habrían reemplazado a nuestra Constitución", opinó.
Sobre la manera de salir del punto muerto en que se encuentra el país tras el plebiscito, aseveró que si hay "buena voluntad" de parte del Gobierno y las FARC será posible reformar un acuerdo que como estaba podía haber hecho de Colombia "una segunda Venezuela".
A juicio del expresidente, el obstáculo principal sería que el Gobierno se empeñara en hacer "solo cambios cosméticos" para "distraer a la opinión pública y la comunidad internacional", pues son necesarios cambios de fondo, principalmente en justicia, elegibilidad (de los antiguos guerrilleros) y empresa privada, dijo.
Consideró que hay que darle "protección a las FARC en nombre de la paz pero hacer reformas de fondo en nombre de la democracia". Si el Gobierno lo hace, "esto puede salir bien", dijo.
El expresidente cree que el acuerdo negociado en Cuba desde 2012 no solo era un riesgo para la democracia colombiana sino para la economía del país.
Entre otras cosas, mencionó que implicaba un "alto gasto público inflexible" para satisfacer a las FARC y generaba "pánico" por posibles expropiaciones. Ambas cosas hubieran afectado la competitividad del país y su atractivo para los inversores, además de crear "una crisis social", dijo.
Después de su reunión con la comunidad colombiana, Uribe almorzó con políticos republicanos de Florida como el senador Marco Rubio y los congresistas Ileana Ross-Lehtinen, Carlos Curbelo y Mario Díaz-Balart, los tres de origen cubano, así como con el alcalde de Doral, Luigi Boria, de origen venezolano.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Enviar comentarios: