Una tienda dentro de una vivienda vende banderitas cubanas a los turistas. EFE
Mientras un sector de la población se ha beneficiado de las medidas tomadas por el gobierno de Raúl Castro, otro más amplio aún depende de los pocos alimentos distribuidos por el gobierno a través de la libreta de abastecimiento para sobrevivir.
Las reformas económicas implementadas en Cuba bajo el gobierno de Raúl Castro han acentuado las diferencias sociales en una nación que enarboló durante medio siglo el estandarte de la igualdad de clases, señalan cubanos de la isla entrevistados por Martí Noticias.
“Hay un sector de la población que sí se ha beneficiado con todo esto, pero hay una gran mayoría que no se está beneficiando de estas reformas que ha hecho el gobierno cubano, y eso ya marca una división de clases sociales dentro del país”, dijo el periodista independiente de Ciego de Ávila,Roberto Valdivia.
El periodista señaló que mientras algunos viven holgadamente, otros muchos esperan con ansiedad el día 1ro de cada mes para recibir los pocos alimentos que el gobierno distribuye por la libreta de abastecimiento, especialmente "los jubilados, que viven de un ingreso mínimo de 200 pesos mensuales".
El reportero ciudadano Guillermo del Sol, residente de Santa Clara, dijo que las diferencias son notables en las viviendas, y en las formas de vida que llevan estas familias.
Sobre la “clase alta”, Del Sol explicó que “muchos han adquirido vehículos, están viajando, y tienen el poder adquisitivo para comprar en el exterior y montar sus negocios acá”, mientras que la “clase baja” es un sector muy amplio de personas que “no tienen nada”.
El matancero Francisco Rangel definió a los “nuevos ricos cubanos” como la clase social que “se siente más segura” y “puede vivir dentro del régimen”. Este sector, dice Rangel, quisiera un cambio en el país, pero “de dientes para afuera”.
“Hay un sector de la población que sí se ha beneficiado con todo esto, pero hay una gran mayoría que no se está beneficiando de estas reformas que ha hecho el gobierno cubano, y eso ya marca una división de clases sociales dentro del país”, dijo el periodista independiente de Ciego de Ávila,Roberto Valdivia.
El reportero ciudadano Guillermo del Sol, residente de Santa Clara, dijo que las diferencias son notables en las viviendas, y en las formas de vida que llevan estas familias.
Sobre la “clase alta”, Del Sol explicó que “muchos han adquirido vehículos, están viajando, y tienen el poder adquisitivo para comprar en el exterior y montar sus negocios acá”, mientras que la “clase baja” es un sector muy amplio de personas que “no tienen nada”.
El matancero Francisco Rangel definió a los “nuevos ricos cubanos” como la clase social que “se siente más segura” y “puede vivir dentro del régimen”. Este sector, dice Rangel, quisiera un cambio en el país, pero “de dientes para afuera”.
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