FDHC: 'La apertura económica hacia Cuba no puede perpetuar graves violaciones laborales'
En un comunicado al que tuvo acceso DIARIO DE CUBA, la FDHC urge a las entidades extranjeras, corporaciones y gobiernos, que exijan a La Habana "ejercer su derecho a contratar los empleados cubanos de manera libre, directa, justa y no discriminatoria".
Según el texto emitido por la organización, "las 'empresas mixtas' en Cuba no seleccionan, contratan, ni pagan a los trabajadores directamente; ello se realiza a través de otra empresa estatal, que actúa como intermediaria recibiendo los pagos del inversionista extranjero en moneda convertible y pagando al trabajador una fracción infinitamente menor en pesos cubanos no convertibles".
La FDHC estima que, "con base a este arreglo, la empresa estatal confisca alrededor de un 80 a un 96 % de lo que el inversionista extranjero paga por el trabajador" y agrega que "un sistema de explotación similar se le impone a los profesionales cubanos (médicos, maestros, deportistas, etc.) que prestan servicios en otros países".
Para la organización, "en la selección y contratación del trabajador, las empresas estatales intermediarias (como ACOREX) utilizan criterios de 'idoneidad' y selección política discriminatorios" y "en todo ese proceso el trabajador no puede recurrir a medios no estatales para defenderse, ya que la sindicalización independiente está prohibida y el poder judicial y los medios de prensa están bajo control del mismo estado. Las protestas públicas y las huelgas laborales son penalizadas".
Igualmente denuncia que "estos mecanismos de selección, contratación, remuneración y prohibición de la sindicalización independiente violan varios Convenios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), incluyendo algunos ratificados por (el Gobierno de) Cuba. Incluso algunas de estas violaciones se basan en regulaciones administrativas contrarias a lo establecido en la propia Constitución y Código Laboral" cubanos.
"Ahora que el Gobierno cubano ha reiniciado su esfuerzo por atraer inversionistas extranjeros, se refuerza el desafío de exigir el respeto a derechos humanos y laborales", apunta la FDHC.
En ese sentido, la Fundación y Solidaridad de Trabajadores Cubanos (STC) han decidido trabajar de conjunto en tres áreas, que en primer lugar buscan "promover una alianza con los sindicatos en los países de las inversiones extranjeras que operan en Cuba para que apoyen los derechos de los trabajadores cubanos y exijan a sus empresas que respeten estos derechos".
En segundo lugar se plantean "documentar ante los organismos multilaterales laborales y de derechos humanos —así como ante los gobiernos— en especial aquellos que contratan profesionales cubanos y ante el movimiento sindical mundial, el modo en que las leyes y regulaciones vigentes en Cuba violan los derechos humanos y laborales de los trabajadores cubanos para que exijan el cese de esas violaciones".
Por último, la FDHC y la STC promueven "una campaña al interior de Cuba para exigir de las autoridades cambios a las leyes y códigos laborales vigentes, de manera que no se puedan seguir violando 'legalmente' los derechos de los trabajadores, y para que exista un verdadero marco legal que realmente se corresponda con los derechos universalmente aceptados en los pactos, convenios y declaraciones de las Naciones Unidas y de la OIT".
0 comentarios:
Publicar un comentario
Enviar comentarios: