Raúl Castro se atrinchera en Congreso comunista
“Yo creo que el congreso le está dando un golpe ideológico a los propios comunistas, de manera que hay un divorcio no sólo de la nación cubana, sino con su propia base militante”, asegura un opositor cubano
ANÁLISIS | 16 de Abril de 2016
MIAMI.-ROSA TANIA VALDÉS
Especial
Especial
Que nadie espere ni multipartidismo, ni capitalismo, ni mano floja contra lo que se oponga al sistema vigente en Cuba desde hace medio siglo, fue mensaje del mandatario cubano Raúl Castro al abrir este sábado el congreso del Partido Comunista en un contexto complicado para su gobierno.
Si a alguien le quedaban dudas, Castro las echó por tierra este sábado, durante un discurso en que apareció sin su uniforme de general pero escoltado por una fotografía gigante de su hermano el exgobernante Fidel Castro.
“No es nada casual que se nos ataque y exija desde todas partes o desde casi todas, para debilitarnos, que pretendan que nos dividamos en varios partidos en nombre de la sacrosanta democracia burguesa”, dijo Castro ante los cerca de 1.000 delegados a la reunión que se celebra este fin de semana.
“En Cuba tenemos un partido único, y a mucha honra, que representa y garantiza la unidad de la nación cubana, arma estratégica fundamental con que hemos contado para edificar la obra de la Revolución”, sentenció.
Expertos sostienen que el contexto es extremadamente complicado para la dirección histórica debido, en parte, al deshielo con Estados Unidos y a la reciente visita a la isla del presidente estadounidense Barack Obama, cuyo discurso e interacción con los cubanos barrieron viejos argumentos contra el enemigo todopoderoso.
A lo interno, ha crecido el descontento entre un sector hasta ahora alineado con el Partido Comunista que se muestra inconforme por el secretismo con el que ha sido preparado el actual congreso, que es clave para el futuro del país.
Y aunque Castro ha dicho que no ha sido preciso consultar al pueblo porque se trata de la continuidad del congreso de 2011 que aprobó más de 300 reformas económicas, no pudo ocultar el descontento actual.
“No ignoramos que en determinados sectores existen falta de compromiso y desinterés sobre la vida política, y se mantienen opiniones negativas sobre nuestros cuadros (dirigentes), así como su desvinculación con el pueblo”, admitió Castro el sábado.
De cara al pasado
En entrevista telefónica con DIARIO LAS AMÉRICAS, el opositor cubano Elizardo Sánchez, portavoz de la ilegal pero tolerada Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, expresó que nada ha cambiado en el discurso oficial.
''No vi nada indicativo de que se vayan a hacer reformas en el campo de los derechos civiles, políticos y otros derechos fundamentales. Desde ese ángulo pareciera que el congreso del partido básicamente servirá para reproducir el modelo totalitario de Gobierno", enfatizó.
Respecto a las voces que se levantan dentro del propio partido comunista, Sánchez opina que ha sido el secretismo en torno a los documentos que se debaten en este congreso lo que “ha dejado a los militantes de base esa sensación de que fueron desconocidos".
"Lo dicho por el general Raúl Castro no cambia para nada las expectativas que teníamos antes de esta reunión en cuanto a que no cabe esperar nada de un liderazgo político y de un gobierno cuyo principal objetivo es el continuismo en el desempeño del poder y la inmovilidad en cuanto a la necesidad de reformas verdaderas en el país", agregó.
Opositores dentro y fuera de la isla se muestran escépticos respecto a cambios reales en materia política. Varias iniciativas como Cuba Decide, están exigiendo al gobierno un plebiscito nacional en que cuente la opinión de todos en la reconstrucción del país.
“Por su composición sociológica, me parece que este es un Congreso de cara al pasado, no de cara al futuro”, dijo el opositor Manuel Cuesta Morúa, líder del Partido Arco Progresista.
“Yo creo que el congreso le está dando un golpe ideológico a los propios comunistas, de manera que hay un divorcio no sólo de la nación cubana, sino con su propia base militante”, agregó.
Antonio Rodiles, activista del Foro por los Derechos y Libertades, desestimó resultados significativos de la reunión de los comunistas cubanos prevista hasta el próximo martes 19 de abril.
“Ellos van a darle continuidad a todo este proceso que viene ocurriendo de transferencia del poder. Lo que se necesita aquí, es lo que existe en muchas partes del mundo, es un proceso electoral democrático”, explicó Rodiles.
Se espera que este Congreso apruebe ligeras reformas políticas como la limitación temporal en los cargos del gobierno y el partido a dos períodos de cinco años cada uno y, tal vez, establecerá el tope de 60 años como edad máxima para ingresar al Comité Central del Partido y 70 años para ocupar cargos en su dirección.
Pero más allá de eso, no habría mucho más que esperar.
“Si lograran fragmentarnos sería el comienzo del fin de la patria y el socialismo”, sentenció Castro este sábado.
LEA TAMBIÉN:
0 comentarios:
Publicar un comentario
Enviar comentarios: