Pacto fáustico del Gobierno de EEUU con Cuba
En realidad, el pueblo cubano siempre ha sido amigo del pueblo estadounidense
RELACIONES DIPLOMÁTICAS | 09 de Septiembre de 2015
“Nada conozco más pobre bajo el sol que vosotros, divinidades”. Estas son palabras del genio insurrecto de la creación Prometeo, por el célebre escritor Goethe, Johann Wolfgang von, en su obra Prometeo. Sin embargo, a pesar de resaltar en esa obra la grandeza de la creatividad del ser humano y su autonomía en la vida, no nos referiremos a ella sino a su obra universal Fausto.
Por supuesto, hablar de Fausto, es traer a la palestra el espíritu de incomprensión de la raza humana, en busca de la grandeza, admiración, prestigio, respeto y fama, que vacilantes ante la vida y desilusionados de las ciencias por el inevitable envejecimiento y muerte, venden su alma al diablo a través de los pactos fáusticos.
Esas divinidades, empoderadas en los gobiernos de los países, buscan sus sueños de eterna juventud y poder en la manipulación de sus conciudadanos como masas maleables, que ciegamente siguen sus mandatos y para esto, necesitan la eliminación del Prometeo que existe en cada uno de los ciudadanos.
Hombres ahogados por el exceso de poder que se convirtieron en divinidades absolutas, al ponerse por encima de las propias leyes de sus naciones. Que corrompieron sus constituciones, para tratar de dejar una huella imborrable personal en la historia universal.
Por eso, estas nuevas relaciones diplomáticas entre los gobiernos de EEUU y Cuba, específicamente entre los mandatarios Barack Obama y Raúl Castro, es lo que podemos nombrar como pacto fáustico.
El régimen socialista de los Castro es de facto, violaron la Constitución de 1940, aprobada libremente y con la participación de todas las fuerzas políticas de la nación, suspendida de facto y no abrogada de jure; finalmente impusieron el adefesio constitucional comunista de 1976, la cual viola de forma institucional los derechos inalienables de los cubanos.
Por otra parte, el mandatario Barack viola la ley americana, específicamente el Acta Para la Libertad y La Solidaridad Democrática Cubanas, Ley Libertad, de Helms-Burton, de 1996, en sus Propósitos, Sección 3, y la Parte II, Sección 201 (13 y 14); 202; 203; 204; 205 y 206. Ley aprobada por el Congreso americano en representación del pueblo.
John Kerry, secretario de Estado de EEUU, en su discurso en La Habana, me recordó los diálogos entre Fausto y Mefistófeles, y como el nuevo Mefistófeles fue embriagador y beldad con sus palabras para subrepticiamente enmascarar el profundo interés económico sobre la isla, aunque exaltara su preocupación por la democracia, los derechos humanos y la libertad de los cubanos. Esta era la forma manipuladora de sus palabras para llevar al homicidio a Gretchen (Cuba).
En realidad, el pueblo cubano siempre ha sido amigo del pueblo estadounidense, desde que nuestros ascendentes aportaron recursos logísticos y financieros para la causa de la independencia y la libertad de los estadounidenses, u olvidamos que las damas de La Habana ofrecieron sus joyas y riquezas, inclusos hasta las más pobres dieron lo poco que tenían, para esa causa de libertad; o que los isleños de Cuba sufrieron en silencio el desmembramiento de su patria por la venta de sus tierras, Florida y Luisiana, a sus conciudadanos por parte de la metrópolis, España. Estos son dos de los más antiguos de los muchos gestos de altruismo del pueblo cubano con su nación. Sr. Kerry, usted debió decir, dos gobiernos ya no enemigo ni rivales, sino vecino. Porque los cubanos y estadounidenses estamos hermanados y amigados por la historia.
Sin embargo, Sr. Kerry, hay en sus palabras algunas que debemos resaltar como verdades importantes y que analizaremos. Esto es un “momento verdaderamente histórico”; o “son los cubanos los que tienen que moldear el futuro de Cuba”; y la firme realidad de que el “embargo (es un) acto del Congreso”.
Los 10 anteriores gobiernos de su país, junto al régimen de Castro, han sido enemigos por más de medio siglo. Al instaurar las relaciones diplomáticas y usted asistir a la concreción de esos lazos, hacen resaltar este hecho en la Historia; y por supuesto, hace 70 años que un jefe de la cancillería estadounidense no viajaba a Cuba. Estos son dos momentos históricos de ambas naciones pero al realizarse con un pueblo humillado y sin libertad por una dictadura, hace que esto sea recordado como un hecho histórico tristemente célebre.
El embargo, su gobierno no lo puede levantar. Este es una ley de Congreso que expresa la voluntad del pueblo estadounidense; y es la firme y altruista decisión de ese pueblo de ver, no a sus vecinos, sino a sus hermanos y amigos cubanos en libertad. Es la hija de la Resolución Conjunta de 1898, que aseguró la independencia de Cuba. Por eso, los cubanos que amamos la libertad decimos mil veces gracias pueblo americano y sus representantes y senadores en el Congreso, Cuba será libre.
Sabemos que esto es una solución que los cubanos debemos resolver, desde que nos abandonaron en los pantanos de Bahía de Cochino, sin proyectiles y contra el numeroso ejercito comunista guiado por los soviéticos, incluso por las enseñanzas de la historia y científicos como Gene Sharp. ¡Nadie nos llevará a una rendición negociada, ni nacionales ni mucho menos gobiernos extranjeros!; “en los conflictos donde cuestiones fundamentales están en juego, ‘la resistencia’, no las negociaciones, es lo esencial para el cambio. La resistencia debe continuar hasta que los dictadores sean expulsados del poder”. Y continua Sharp, “El desafío político o lucha no violenta es el método más poderoso que puede emplear los que luchan por la libertad”. Este es la esencia misma del Proyecto Emilia.
En mi opinión, adhiriéndome a la de Oseas, estos reyes y príncipes, hombres hechos divinidades, no son escogidos por el Dios Bíblico; y así como el pacto fáustico fue roto y la Gretchen fue liberada del infierno, también la Gretchen Cuba será absuelta y vivirá en libertad.
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