EDITORIAL
Hemos seguido detenidamente cada uno de los detalles
del encarcelamiento, juicio y sanción del dirigente de voluntad popular
Leopoldo López. Desde un principio hemos comprobado que las largas manos del
tirano de Cuba han estado manipulando las cuerdas para que su títere Nicolás
Maduro pudiera ejecutar la maniobra planeada desde La Habana, Cuba. No cabe
dudas, los mismos métodos que se aplicaron en la isla en los primeros años de
la fatídica revolución, se aplican hoy en Venezuela para implantar el
terrorismo de estado que sufre hace más de medio siglo el pueblo cubano. No hay
diferencias, todo es copia al carbón.
Como cubanos y como latinoamericanos, nos preocupa
la suerte que corren nuestros hermanos del país de Simón Bolívar. Estamos
observando y tememos que el exceso de
medidas represivas contra la oposición interna en Venezuela, desencadene en un
trágico
derramamiento de sangre. Todos hemos sido testigos del heroísmo de los
estudiantes que se lanzaron y mantuvieron en las calles a lo largo y ancho del
país manifestando su desaprobación al régimen de Nicolás Maduro, y este, no ha
tenido miramientos al añadir más leña al fuego con su incompetencia,
desconocimiento y altanería.
La situación política, económica y social en el país
Sur Americano cada día se torna más negro; la inseguridad, la falta de
alimentos básicos, la falta de tacto político forman parte de los planes de un
Presidente incompetente, que desconoce los derechos de su pueblo y trata de
ignorar los deseos del ciudadano que ya está cansado de ser avasallado por
alguien que es manipulado abiertamente por un tirano desde un país lejano.
El Partido Unión por Cuba Libre con su Ejecutivo
Nacional en La Habana Cuba y el Ejecutivo Central en Miami y los Gestores del
Proyecto Emilia, condenamos la maniobra política de la Jueza Susana Barreiros,
quien obedeciendo los caprichos, ambiciones y el temor de Nicolás Maduro,
aplico una dura sanción contra el dirigente del Partido Voluntad Popular
Leopoldo López.
Condenamos la intromisión directa de las Fuerzas
Armadas Cubanas que en estos momentos se encuentran acantonadas en el hermano
país para entrar en acción si fuera necesario si ocurriera un desbordamiento
social y las consecuencias de dicha acción.
Condenamos los planes desestabilizadores y expansionistas del Presidente Nicolás Maduro
en la región siguiendo las órdenes del tirano de Cuba Raúl Castro con el
propósito de extender los predios de hambre, miseria, enfermedades, muerte y
división de la familia que prevalecen en Cuba.
Condenamos las deportaciones de colombianos que se
encuentran en las zonas limítrofes de ambos países por considerarlas como actos
de provocación y en busca de un motivo
para la suspensión de las elecciones
para elegir la Asamblea Nacional en Venezuela el próximo 8 de diciembre.
Alertamos a los organismos regionales, la ONU, OEA,
y otras organizaciones de carácter internacional a estar vigilantes sobre las
intenciones abiertamente provocadoras del régimen de Nicolás Maduro que pueden
desembocar en un conflicto armada y poner en peligro las elecciones del próximo
día 8 de diciembre a celebrarse en Venezuela.
Apoyamos incondicionalmente al heroico pueblo de
Venezuela en sus intenciones de derrotar por medio de los votos, en elecciones
limpias al títere de la tiranía Castrista.
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